domingo, 8 de abril de 2012

PREGÓN 2012

El Domingo de Ramos día 1 de Abril se celebró a las 12.30 "El Pregón de la Semana Santa de Puente Genil" en la Iglesia de la Asunción (Iglesia del antiguo Hospital) a cargo del hermano Samaritano y miembro de la Real Cofradía de Santísimo Cristo de la Misericordia y María Santísima  de Mayor Dolor Ernesto Cáceres Molina.


Debemos todos congratularnos del hecho, comentado públicamente y con caballerosidad en diferentes foros por ilustres Pregoneros antecesores de nuestro hermano Ernesto, de que los aplausos del auditorio que siguieron a la finalización de su intervención en la antigua Iglesia de la Asunción el pasado Domingo de Ramos son los de mayor duración que se recuerdan en mucho tiempo.
El autor insiste en que, aún más si reconoce su lógico estado de nerviosismo previo, la aceptación unánime de su disertación por el pueblo de Puente Genil la debe a nuestros Santísimos titulares, el Cristo de la Misericordia y María Santísima del Mayor Dolor, a cuyos pies puso el texto, y al Señor de la Humildad y Paciencia, del que lleva siendo bastonero 20 años, y al que suplicó le prestara ayuda nada más salir al escenario, pues iba a tenerlo a sus espaldas durante aquella intensa hora en la que nos abrió su corazón, sin pudor por la desnudez y la sinceridad de sus apasionadas palabras ni por sus visibles lágrimas en determinados pasajes.
Pero cabe destacar algunas notas del Pregón diseñado por el hermano Ernesto para cubrir de lisonjas a  su amado pueblo de Puente Genil y a nuestra Mananta.
Sin duda la intención debió ser un discurso que ganara progresivamente en intensidad. Sin embargo, el primer detalle a destacar fue precisamente el comienzo inusual del Pregón, con una llamada de atención al público, previa incluso a sus “buenos días”, en forma de poema dedicado a LA BORRIQUITA. Aquello fue un situarnos al instante en la trascendencia del evento ante el que nos encontrábamos y un aviso a los asistentes de cuál iba a ser el “palo” en el que se iba a desenvolver el protagonista. La poesía. Una poesía que iría emergiendo en diferentes formas: romances de versos de ocho sílabas, composiciones de endecasílabos, otras de verso libre, prosa lírica… para concluir en un poema final cuyo contenido todavía quizás sorprenda al mundo cofrade cuando sea conocido en su detalle con la publicación del texto en el próximo número de nuestra Revista de Semana Santa (que se editará el próximo año 2013): bajo aquel lenguaje marcial con el que el autor jugaba a convocar a la cristiandad a defender al maestro galileo (“SEGUIDORES DE ESTE DIOS AJUSTICIADO, / A DEFENDER A CRISTO YO OS CONVOCO, / NOS COMPETE SER SU EJÉRCITO DE ÁNGELES, / TOMEMOS DE ESTE RÍO LAS DOS MÁRGENES, / ONDEANDO LOS BLASONES CON ARROJO…”), bajo aquellas palabras, se escondía un poema acróstico en el que quienes tuvimos por elección del autor el honor de examinar el texto con carácter previo a su recitado descubrimos una plegaria compuesta por las letras iniciales de cada verso, leyenda vertical que reza: “SANTO CRISTO DE LA MISERICORDIA, PROTÉGENOS”.
Pero, antes de aquel vistoso final, también original y desconocido hasta ahora, también por ello, creemos, innovador, en el que los estandartes de las Cofradías del Viernes Santo, junto con el del Imperio Romano, se colocaron ante el público para tapizar el escenario de terciopelo y oro, cubrir al propio poeta, y quedar a los pies del Señor de la Humildad como promesa de asistencia al mismo y defensa de nuestra fe, antes de ello, hubo otros peldaños que nos iban marcando el camino sin darnos cuenta en aquel ascenso en la emoción.
La segunda parada del autor constituyó un poema breve dedicado a EL ABRAZO (“Y si rota tu garganta, / tu voz calla, que hable él, / mas no falte en un cuartel / un abrazo en La Mananta…”). La tercera, tras cantar a nuestra singularidad más genuina, el HOMENAJE A JOSÉ ARCOS Y EDUARDO CEJAS, como autores de la conmovedora marcha RECUERDO. La cuarta fue quizás la más emotiva, dedicada a nuestra descendencia: EPÍSTOLA A LA SANGRE QUE NOS SIGUE, con un verso cargado de ternura que se repetía  cada varias estrofas y que sirvió al auditorio para presenciar el diálogo entre el autor y sus hijas (“El día que yo sea una estrella…”). Y la quinta, previa a la despedida y exhortación a defender a Cristo de la que ya hemos hablado, fue quizá el paseo más extenso por la poesía, con un recorrido por el Viernes Santo desde su madrugada hasta el encierro de María Santísima de la Soledad; extenso recorrido que el hermano Ernesto amenizó con acierto permitiendo que se escucharan fugaces y leves las notas de la Diana, también una saeta interpretada magistralmente por Jorge Vilchez, de la Corporación hermana de “EL DEGUELLO”, e incluso un cántico coreado dedicado a María Santísima de las Angustias por nuestra SCHOLA CANTORUM, siempre tan servicial, siempre tan magistral en la ejecución de sus interpretaciones. Dicho PASEO POR EL VIERNES SANTO intentaba trasladar al auditorio las inefables, continuas y sorpresivas sensaciones que nos invaden “ese día en que murió Cristo” cuando en mitad de nuestros desfiles procesionales acontecen “representaciones inesperadas”, todo lo cual sumerge al espectador en un aguacero de deliciosos flashes que impactan su retina, aunque pudieran parecer incongruentes en un principio: las celebraciones y las correrías del Demonio y de la Muerte frente a la compunción de María Santísima de la Soledad y sus bastoneros; los pequeños divirtiéndose con los leves latigazos de los Judíos de Azote, entretanto el cuerpo yerto de Nuestro Señor Jesucristo yace en los brazos de su dulcísima Madre… “Puente Genil es diferente. Puente Genil es único…” decía el Pregonero. Y de ese poema deliberadamente irregular en cuanto a su estructura y a su rima podemos extraer sentencias expresadas por el autor en tercetos independientes que pretendían condensar el mensaje cristiano o costumbrista. Recordamos algunos:
           
           “LLEGARON, MÁS LUZ A LA MAÑANA,
            EL CRISTO Y DE MALVA Y LUNA
            SU ESCOLTA SAMARITANA…”

“HUELE A ACANTO Y A AZALEA
CUANDO POR DON GONZALO
LAS ANGUSTIAS PASEA…”

            “HACIA EL CALLEJÓN DEL ARCO
AMAGAN DEMONIO Y MUERTE,
SU VÍCTIMA PISA UN CHARCO…”

            “HUYENDO DE LOS JETONES
UN ZAGAL POR LA CUESTA VITA,
ETERNOS LOS ESCALONES…”

      Jamás olvidaremos tan mágico Domingo de Ramos.
El Pregonero insiste: “el Pregón fue de todos, vosotros lo inspirasteis…”
Dulces recuerdos que perdurarán para siempre en nuestra memoria.
Gracias por siempre, hermano Ernesto.
                                              
                                            TU COFRADÍA






Schola Cantorum en la comida de la Función del año 2009 (Cuartel de Los Samaritanos)